sábado, 29 de septiembre de 2012

Golpe mortal a la cooperación al desarrollo


Los Presupuestos Generales del Estado pueden suponer la desaparición de una política pública consolidada durante décadas

Madrid, 28/09/2012. Todo apunta a que los Presupuestos Generales del Estado aprobados supondrán un golpe mortal para la política de cooperación al desarrollo. El 75,9% de los presupuestos destinado al pago de los intereses de la deuda, hace temer un escaso margen para la implementación de política sociales y, por tanto, de la cooperación al desarrollo. Todo nos hace temer que podemos dar casi por desaparecida una política pública que ha pasado de  tener el respaldo político y económico de todos los grupos políticos hasta el 2010, a sufrir  un constante debilitamiento progresivo en los últimos tiempos. La gravedad de la situación no tiene precedentes; es absolutamente escandaloso que la crisis la paguen las personas más vulnerables.

La Coordinadora de ONG para el Desarrollo expresa su más absoluto rechazo a la desaparición en la práctica de la política de Cooperación al Desarrollo que supondrá gravísimas consecuencias para cientos de miles de personas con quienes trabajamos en más de 120 países en el mundo. Supondrá además el desmantelamiento de una política pública con décadas de trabajo y experiencia a sus espaldas. Y, sin duda, tendrá también graves consecuencias para las más de 8.000 personas que trabajan en el sector.
Sorprende esta decisión del gobierno cuando, precisamente antes de ayer, el Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy en su intervención en la Asamblea General de Naciones Unidas declaró su compromiso con la seguridad, los derechos humanos y el desarrollo en la región del Sahel, un compromiso “que se viene demostrando desde hace años con muchos millones de euros en cooperación al desarrollo en muchos países”. También el Secretario General de Cooperación Internacional y Desarrollo, Gonzalo Robles, reiteró el compromiso del gobierno con los ODM.

A pesar de estas declaraciones, con un presupuesto exiguo será prácticamente imposible que el próximo Plan Director garantice el mantenimiento de la cooperación al desarrollo como una política de Estado. Ahora que el gobierno defiende la Marca España, flaco favor le hace cuando golpea de esta forma a una de las políticas que hasta hace un tiempo contaba con un importante reconocimiento internacional. No podemos dejar de recordar, ahora más que nunca, que los partidos políticos con presencia parlamentaria firmaron un Pacto de Estado contra la Pobreza en el que se comprometieron con la ciudadanía a garantizar que así fuera. ¿Dónde quedan, entonces, los compromisos políticos?

Más información: Yolanda Polo yolanda.polo@coordinadoraongd.org 91 523 4905 ext. 132 / 695 940 370


martes, 25 de septiembre de 2012

El presupuesto de Defensa, prioritario

Los Presupuestos Generales del Estado 2012 redujeron el monto de los diversos Ministerios en un 17% de promedio respecto al año anterior. Ya entonces desde las entidades sociales denunciábamos que algunos gastos, como los militares o del Ministerio del Interior, sufrían un recorte mucho menor (un 8,87% en el caso de Defensa) que otros, como la cooperación internacional (AECID, -61,2%) o los gastos sociales en su conjunto.
A principios de septiembre el Consejo de Ministros aprobó un crédito de 1.782 millones de euros -con cargo al Ministerio de Defensa- para "compras de armamento anteriormente comprometidas", pasando por encima de otros "compromisos anteriores con la ciudadanía" en sanidad o educación, por ejemplo.
De esta manera, y si no hay nuevos créditos o gastos extraordinarios, finalmente no habrá una disminución del presupuesto de Defensa 2012 sino que dicho presupuesto habrá aumentado ... en un 16,88% !!. Inaudito pero cierto: en estos tiempos de crisis, los recortes no llegan al gasto militar.
Gobernar es marcar prioridades y éstas son las prioridades del Gobierno actual: incremento en Defensa, recorte de gastos sociales, recentralización del Estado y modificación de la Constitución para asegurar, siempre en primer lugar, el pago de la deuda externa. Un cóctel explosivo que, a mi juicio, sobrepasa el límite de la inmoralidad.

sábado, 22 de septiembre de 2012

Cosas que conviene recordar sobre Cataluña

1. El último texto del Estatuto de Cataluña redactado por la ponencia tuvo tres recortes importantes: en el Parlament de Catalunya, en el Congreso de Diputados de Madrid y en el Tribunal Constitucional. A pèsar de eso el Estado español lo incumple sistemáticamente cada año en diversos artículos, polr ejemplo al elaborar los Presupuestos Generales del Estado.

2. Los últimos datos de balanzas fiscales entre Comunidades Autónomas españolas son de 2005, y el Gobierno español no tiene nningunas ganas de publicarlas más, a la vista de que los cálculos realizados por diversas Universidades indican que el trasvase del 8% del PIB catalán que no regresa en forma de inversiones ni de traspasos es continuado y sistemático, un dato que no tiene parangón en ningún país democrático.

3. El historiador Josep Coroleu formuló hace 120 años una pregunta: "¿Para que España sea España, es necesario que Cataluña deje de ser Cataluña?" Por lo visto la respuesta -casi un siglo y medio más tarde- sigue siendo que sí, ya que de forma permanente se pretende 'normalizar' ahora la lengua vehicular en la escuela, ahora algunos signos culturales, ahora la capacidad de autogobierno, ahora una parcela de poder consagrada en el Estatut, ahora la capacidad de legislar algo, ...

4. No hay ningún artículo de la Constitución española -un instrumento de nuestra democracia, y no al revés- donde se diga por qué Cataluña es España. Tampoco encuentro, en los últimos meses, argumentos racionales rigurosos que avalen por qué Cataluña debe formar parte de un Estado si su población no quiere.

5. Si la Constitución debe cambiarse en referéndum, ¿por qué se acaba de modificar por acuerdo entre los dos partidos españoles mayoritarios?. Si la Constitución es sagrada, los Estatutos también lo son y el Estado español debe cumplirlos con escrupulosidad y no lo hace. Si el derecho de un pueblo que se considera nación tiene que dirimirse entre los pueblos vecinos, ¿por qué no votamos todos los europeos el referéndum sobre la independencia de Escocia?. ¿Por qué no votan los ingleses?

lunes, 10 de septiembre de 2012

España: mejor buenos vecinos que malos primos

Una conocida mía madrileña, del mundo de las ONG, me preguntó hace unos días exactamenté qué queríamos los catalanes. Obviamente no puedo responder por todos, pero le dije que yo sólo veía el encaje de nuestra identidad en España en clave federal, y estoy convencido que España nunca será federal, porque la mentalidad de lo que denomino "las Españas" no es, ni ha sido ni creo que podrá ser federal porque se forjó en un imperio centralizado y jacobino y porque no hay ninguna voluntad de profundizar en este esquema que no da réditos políticos fuera de Cataluña o del País Vasco. La expresión más genuina de esa mentalidad es la constatación repetida de que "Madrid es España y España es Madrid", y ése sí que es -a mi juicio- uno de los principales problemas de ese Estado.

Lo que queremos una parte ya sustancial del pueblo de Cataluña es vivir en la normalidad democrática desde un estado democrático, no demonizados por nuestros vecinos ni teniendo que dar explicaciones de quiénes somos y por qué existimos. Es decir, queremos ser un Estado más de Europa que trabaje junto a los demás pueblos. Así de sencillo.

Me preocupa que la población española no esté ni bien ni nada informada de lo que queremos en Cataluña, y me preocupa mucho que la caverna mediática madrileña -léase, pues, española-  vaya acompañada por manifestaciones de personas que ejercen responsabilidades políticas (por ejemplo los presidentes de Extremadura, de Madrid o de Galicia), que mienten con total impunidad y lanzan repetidamente mensajes populistas, falsos y profundamente antidemocráticos sobre la realidad de Cataluña, consiguiendo lamentablemente que sea verdad lo que dijo Josep Pla hace cincuenta años de que en la cuestión catalana "lo más parecido a un español de derechas es un español de izquierdas".

Me preocupa también que Cataluña suponga el 20% del PIB español y -por ejemplo- más del 25% de las contribuciones al fondo de pensiones, porque eso significa una gran dificultad no para la viabilidad del estado catalán sino del estado español.

Me preocupa que tantos ciudadanos españoles estén tan preocupados por nosotros y ocupemos una parte negativa de sus pensamientos, porque todas las personas tenemos derecho a ser felices y a pensar siempre en positivo. Por eso, les diría a todas las personas de buena voluntad de toda España que se ocupen en conseguir juntas -ellas y nosotras- ser excelentes vecinos, después de cinco siglos de ser solamente mediocres familiares.